El profesor de la UCLM Luis Arroyo Zapatero recibe el reconocimiento de la comunidad académica por su trayectoria profesional y humana

Homenaje organizado por el Instituto de Derecho Penal Europeo e Internacional de la Universidad regional

El Instituto de Derecho Penal Europeo e Internacional de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) ha brindado hoy un cariñoso homenaje al que fue su fundador y actual director, el profesor de Derecho Penal Luis Arroyo Zapatero, jubilado este año. Sus compañeros han reconocido a “un todo”, gran hombre y gran profesional dedicado a la docencia, la investigación y la gestión. El acto se ha llevado a cabo en el Campus de Ciudad Real y ha reunido a expertos y juristas penales de calado internacional, a los exrectores de la Universidad regional, Ernesto Martínez Ataz y Miguel Ángel Collado; y al actual, Julián Garde.

El profesor de Derecho Penal de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) Luis Arroyo Zapatero ha recibido hoy el cariño y reconocimiento de sus colegas académicos durante el acto de homenaje celebrado en el Paraninfo del Rectorado de Ciudad Real que le ha brindado el Instituto de Derecho Penal Europeo e Internacional con motivo de su jubilación, este año, tras una dilatada vida universitaria en la que ha compaginado la docencia y la investigación con la gestión de la institución académica y los contactos internacionales.

Arroyo Zapatero fue rector de la UCLM durante 15 años (1988-2003), es rector honorario y tras su jubilación seguirá vinculado a esta ‘casa’ como profesor emérito “mientras que tenga fuerzas, porque esta es una profesión vocacional”. Hoy se mostraba ante los medios de comunicación agradecido y emocionado por este homenaje y comentaba la “suerte” que ha tenido en esta vida de ser lo que siempre quiso ser desde chico, “catedrático”. Ha reconocido que “no fue fácil”, porque “todo fue una carrera de obstáculos. Desde mi época de estudiante y con la Dictadura me cayeron varias piedras que me impedían el acceso a la Universidad, pero Alemania me dio la oportunidad de preparar allí mi tesis doctoral y a la vuelta puede incorporarme a la vida universitaria”.

Suerte que le acompañó más allá, cuando un día recibió la invitación para participar en la creación de la Universidad de Castilla-La Mancha, algo en lo que “casi nadie creía que saliera bien” y que hoy es una realidad. Precisamente, fue su época como rector, lo “más constituyente” para él, -junto con su formación en Alemania y ahora ser miembro de la Academia de Ciencias Morales y Políticas de Francia-, ya que aquella le dio “unas posibilidades de acción y de creación como ninguna otra”, además de “reconocimiento”.

De aquellos años como rector ha recordado que “pudimos hacer todo lo que quisimos hacer”, en gran parte, como ha dicho, porque “tuvimos una relación de sintonía completa y de complicidad” con el Gobierno regional, sin llegar nunca a perder la autonomía de la Universidad. Tarea no fácil, pero “creo que la mantuve”.

Hoy, en su discurso ante quienes le han acompañado en este homenaje del Instituto de Derecho Penal Europeo e Internacional, del que el propio Arroyo fue fundador y es su director, ha señalado que fue el jurista Marino Barbero Santos, único catedrático que se negó a jurar los principios del Movimiento, quien despertó en él su “pasión contra la crueldad del Derecho Penal” cuando tan sólo era un joven estudiante de segundo de Derecho en la Universidad de Valladolid. Su primera clase le dejó “impactado” y, desde entonces, a lo largo de su trayectoria profesional tres han sido las pasiones que le han acompañado: la pasión contra la crueldad, la pasión por el conocimiento científico y la pasión contra la inequidad.

En un día tan especial, Arroyo Zapatero ha estado arropado por amigos, familiares, compañeros y por los rectores que lo sucedieron en el cargo: Ernesto Martínez Ataz, Miguel Ángel Collado y el actual, Julián Garde. Los tres han elogiado la figura humana y profesional de una persona “sin la que la Universidad de Castilla-La Mancha no hubiera podido ser lo que es”. “Principal arquitecto” de esta institución, han coincidido en que fue capaz de transmitir a los siguientes “una Universidad mejor” de la que él recibió, hecho que han reconocido y agradecido profundamente.

Jornadas
El homenaje se enmarca en el contexto de la celebración de un seminario internacional que comenzó ayer y que ha continuado hoy con la participación de expertos en la materia para reflexionar sobre la abolición de la pena de muerte y el Derecho Penal Internacional, temas que ha cultivado a lo largo de su carrera el profesor Arroyo. La jornada concluyó con una cena homenaje en la que se le hizo entrega de la obra Libro homenaje al profesor Luis Arroyo Zapatero. Un derecho penal humanista, compuesto de dos tomos y al que han contribuido más de un centenar de firmas. Su grosor demuestra que “el profesor Arroyo tiene muchos amigos y colegas en el mundo académico”, indicaba a la prensa la profesora titular de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de Ciudad Real y miembro del Instituto organizador Marta Muñoz de Morales.

Luis Arroyo Zapatero (Valladolid, 1951) es catedrático de Derecho Penal. Desde 2002 es presidente de la Société Internationale de Defénse Sociale y miembro correspondiente de la Academia de Ciencias Morales y Políticas de París (Francia). Miembro del Consejo Científico Asesor del Instituto Max-Planck de Derecho Penal Extranjero e Internacional de Friburgo en Alemania desde 2006 y vicepresidente de éste de 2009 a 2018, Arroyo Zapatero ha sido distinguido doctor honoris causa por varias universidades.

Con 6 tramos de investigación reconocidos en el sistema científico español -el máximo-, Luis Arroyo Zapatero es autor de una cincuentena de artículos científicos y de numerosas publicaciones centradas fundamentalmente en cuatro campos: la protección penal del ser humano en el trabajo, el Derecho Penal Económico, el Derecho Penal Europeo y las relaciones entre el Derecho Penal y Constitución.