La Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) participa en un estudio internacional en el que se revela el papel clave de los macrófagos del sistema inmune en la regeneración de órganos, a través de la estimulación del crecimiento de las cuernas en ciervas y su inhibición en machos tras la eliminación de macrófagos.
Este es un hallazgo “sorprendente”, como indica el profesor de la UCLM Tomás Landete, quien participa en la presente investigación, en representación del grupo de Biología y Producción de Cérvidos de la UCLM (IREC e IDR), publicada en la revista de impacto Proceedings of the National Academy of Sciences.
Este equipo internacional de investigadores ha demostrado por primera vez en mamíferos que el sistema inmunitario innato (en particular, los macrófagos) es el «interruptor maestro» de la generación y regeneración de tejidos y órganos. El estudio se encuadra dentro de la línea de investigación en cuernas de ciervo que dirigen el doctor Chunyi Li (líder del ranking en estos estudios, según la web Expert Scape), del Instituto de Ciencia de la Cuerna y Tecnología de sus Productos en Changchun, China, y el doctor Tomás Landete (quinto en ese ranking), del grupo de Biología y Producción de Cérvidos de la UCLM (IREC e IDR).
Según la teoría del equipo de científicos, son los macrófagos, que se acumulan en el tejido llamado periostio (alrededor del hueso) antlerogénico (creador de la cuerna), los que estimulan la regeneración de la cuerna tras activarse con testosterona. “En esa respuesta desempeña un papel clave una molécula de comunicación entre células o citoquina, llamada CCL2, que atrae a los macrófagos al lugar para iniciar dicha regeneración”, indican que “un hallazgo sorprendente fue que se podía inducir el crecimiento de cuernas en hembras de ciervo (que nunca las desarrollan) si se inyectaba CCL2 para atraer a los macrófagos, o también el inductor de la respuesta inmunitaria llamado lipopolisacárido (LPS)”. La CCL2, explican, se libera normalmente en la respuesta inflamatoria.
Los autores descubrieron que las hembras tenían células madre en el hueso que podían producir las cuernas, pero que la falta de testosterona impedía atraer los macrófagos e iniciar el crecimiento de la cuerna, como sí lo hacían estos inductores.
Durante su estancia de dos años en la UCLM, el doctor Datao Wang (primer autor del estudio) indujo el crecimiento de cuernas en varias hembras que hoy siguen en la granja experimental de la UCLM, un estudio cuyos resultados se publicarán en un próximo artículo.
La otra línea de evidencia que muestra este estudio es que si se eliminan los macrófagos de la cuerna (bien sea en ciervos o en ratones con cuernas injertadas) las cuernas no se regeneran. Según indica el profesor Landete, “las cuernas son una estructura única y fascinante con múltiples aplicaciones en medicina: desde los efectos anticancerígenos que estudia nuestro grupo, a los efectos de regeneración de heridas sin cicatriz o antienvejecimiento que estudian mis colegas Chunyi y Datao”.
Este estudio es un paso trascendental que podría mostrar una vía para estimular la regeneración de tejidos o incluso en casos de partes amputadas en humanos.
La investigación, de la que también es coautor el doctor Louis Chonco, del mismo grupo, refuerza el papel de la UCLM en la investigación internacional de vanguardia y destaca la importancia de la colaboración científica global para desentrañar los misterios de la naturaleza.