El Centro de Estudios de Castilla-La Mancha incide en el valor de la fotografía como fedataria de los cambios sociales

La fotografía constituye uno de los mejores registros del paso del tiempo y la consiguiente evolución de la sociedad, de sus usos y costumbres. Con esta premisa celebra el Centro de Estudios de Castilla-La Mancha su séptimo Encuentro de Historia de la Fotografía, un acontecimiento que reúne hasta mañana en la Facultad de Letras de Ciudad Real a estudiosos y profesionales de esta actividad, que combina arte y técnica. El plato fuerte de la iniciativa será la presentación, mañana, de un daguerrotipo con una panorámica de Toledo, una joya datada a mediados del siglo XIX que podría considerarse la primera «foto» de la capital regional.

«Queremos hacer visible un segundo plano de la fotografía que no forma parte de los libros de historia». El profesor de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) Rafael Villena Espinosa resume en esta frase la intención del VII Encuentro de Historia de la Fotografía que él mismo dirige y que se ha inaugurado hoy en la Facultad de Letras de Ciudad Real. Promovido por el Centro de Estudios de Castilla-La Mancha –instituto de investigación perteneciente a la UCLM-, reúne hasta mañana a fotógrafos, profesores e investigadores procedentes de distintos puntos del país para debatir sobre la relación entre la fotografía y la sociedad, incidiendo en su papel en la investigación histórica y su importancia en el rescate de la memoria.

En la misma línea se ha situado la también profesora Esther Almarcha, directora del Centro de Estudios de Castilla-La Mancha, subrayando que este valor de la fotografía como fedataria de los cambios sociales alcanza ahora su mayor potencial gracias a las plataformas digitales, que posibilitan, por ejemplo, que el Encuentro de Historia de la Fotografía se complete con dos exposiciones físicas y virtuales sobre la provincia de Ciudad Real y la Plaza Mayor de la capital, y a las que puede accederse desde la web del centro https://www.uclm.es/ceclm/

Por su parte, el rector, Miguel Ángel Collado, ha elogiado la labor del Centro de Estudios de Castilla-La Mancha, «del que nos sentimos orgullosos porque, entre otras labores, protege el patrimonio gráfico y hemerográfico de la región». En su opinión, el centro sirve a la sociedad contribuyendo a la conservación y la protección de ese patrimonio y difundiéndolo en iniciativas como el propio encuentro.

Precisamente, mañana se presentará la que puede considerarse una de estas joyas del patrimonio gráfico de Castilla-La Mancha: el raro daguerrotipo de una panorámica de Toledo, la primera «foto» de estas características de la capital regional, y que data de mediados del siglo XIX. Físicamente es una placa metálica, de cobre plateado, de unos dieciséis por doce centímetros y en la que se puede apreciar una imagen nítida de Toledo, con el Alcázar y varias de sus iglesias e, incluso, ropa tendida al sol, sobre los matorrales.

La encargada de presentar esta pieza será la profesora de la Universitat Pompeu Fabra María de los Santos García Felguera, quien ha explicado esta mañana a los periodistas el novelesco proceso de hallazgo de la imagen. «José Valderrey, el propietario del daguerrotipo, compró la pieza a un chamarilero de San Sebastián en 2012. El daguerrotipo estaba en un cajón con tornillos, chatarra, y cosas viejas. El mérito de Valderrey –apunta la profesora- estuvo en darse cuenta del valor de esta imagen de Toledo». Valderrey, que no ha podido desplazarse a Ciudad Real como era su intención, se limitó a limpiar la imagen con una pera de aire, con la intención de eliminar las partículas de polvo depositadas por el paso del tiempo.

Unos años después, Valderrey contactó con María de los Santos García en un encuentro de fotografía para mostrarle su hallazgo. Y, tras constatar su enorme valor, ella le propuso presentarlo públicamente en el Encuentro de Historia de la Fotografía de Castilla-La Mancha, un gesto que la profesora Esther Almarcha le ha agradecido públicamente.